Las mujeres afrodescendientes siguen portando la antorcha de la justicia ante las desigualdades de largo arraigo

Declaración de la Sra. Natalia Kanem, Directora Ejecutiva del UNFPA, en el marco del Día Internacional de los Afrodescendientes de 2023

Las mujeres afrodescendientes forman parte de un extraordinario legado. Han liderado movimientos para poner fin a la esclavitud y defender sus derechos fundamentales, los de sus familias y los de sus comunidades.

La lucha de las mujeres afrodescendientes por la igualdad, la justicia y el reconocimiento nunca ha cesado. Defienden su causa incansablemente puesto que en su realidad experimentan formas de discriminación interseccionales. Con la reivindicación de sus derechos inalienables, contribuyen a sociedades más justas e inclusivas.

El Día Internacional de los Afrodescendientes representa una oportunidad para reconocer sus aportes al mundo y renovar el llamado a promover y proteger los derechos humanos de las personas descendientes de africanos víctimas de la esclavitud.

También es una oportunidad para examinar cómo el racismo sistémico, el sexismo y otros factores siguen menoscabando la capacidad de acción de las mujeres afrodescendientes y provocando que se vean abocadas a una situación de mayor pobreza y peores condiciones de salud.

Los últimos datos del UNFPA ponen de manifiesto que las mujeres y niñas afrodescendientes de las Américas se enfrentan a denegaciones sistémicas de la atención de calidad, malos tratos y abusos por parte del sector sanitario, lo que tiene consecuencias mortales. En los Estados Unidos de América, las mujeres y las niñas afrodescendientes son tres veces más propensas a perder la vida durante o poco después de un parto que las no afrodescendientes; en Suriname, son 2,5 veces más propensas; y en el Brasil y Colombia, 1,6 veces más propensas.

Se trata de muertes que, en su mayoría, son evitables. Podemos poner fin al racismo y al sexismo, fenómenos que propician patrones de abuso y negligencia que cobran tantas vidas. Podemos erradicar la tan profundamente arraigada discriminación que aún está incorporada en los planes de estudio médicos y la prestación de los servicios sanitarios, así como en las decisiones sobre políticas que recortan fondos, personal y equipo para las comunidades afrodescendientes de todo el mundo.

Es necesario desglosar los datos para superar estos obstáculos. La mayoría de los países hacen un seguimiento de las tasas de mortalidad materna, pero solo algunos presentan la variación de las tasas en función de la raza. En las Américas, por ejemplo, solo 11 de 35 países recopilan estadísticas sobre mortalidad materna desglosadas por raza.

El programa pionero de partería comunitaria de Colombia, Partera Vital, redujo las muertes maternas a cero al procurar comprender y responder a las necesidades de una zona con poblaciones afrocolombianas e indígenas. Brindar apoyo a los servicios que satisfacen las necesidades y preferencias que expresan las mujeres y niñas nos permite lograr resultados de gran impacto.

El UNFPA desempeña una función de liderazgo a nivel mundial para la mejora de la atención sanitaria y la consecución de la justicia y el desarrollo en beneficio de las personas afrodescendientes, en especial de las mujeres y niñas. Estamos acelerando los progresos en materia de datos para que los países puedan adoptar medidas correctivas urgentes. Nos queda mucho por hacer, pero jamás nos rendiremos.

Seguiremos trabajando con nuestros asociados para mejorar las condiciones de las comunidades marginadas y poner fin a toda forma de racismo y discriminación. De ese modo, esperamos que algún día el sol brille en un mundo con derechos y opciones para las poblaciones afrodescendientes y para todas las personas.