El territorio palestino ocupado

La guerra en Gaza ha cobrado un precio catastrófico en mujeres y niñas. Han perdido hogares y seres queridos, y, a medida que se acerca el invierno, la comida, el agua, la vivienda adecuada, la protección y la atención sanitaria se hacen cada vez más escasas. La hambruna también es inminente. Muchas familias han sido desplazadas al menos una vez, trasladándose de un lugar inseguro a otro. Los refugios están abarrotados y las condiciones sanitarias son pésimas, lo que expone a mujeres y niñas a la violencia, las infecciones y las enfermedades.

Se han atacado hospitales y ambulancias, y los que sigen funcionando parcialmente enfrentan una grave escasez de suministros médicos y de personal. Se calcula que unas 155.000 mujeres embarazadas y madres primerizas luchan para acceder a la atención médica materna y neonatal. Ha habido un aumento de los nacimientos prematuros y complicados, y el personal médico ha informado de que ya no ven bebés de tamaño saludable entre las 130 mujeres que dan a luz todos los días.

Si bien todos los ojos están puestos en Gaza, los palestinos de la Ribera Occidental y Jerusalén Oriental también están sufriendo niveles alarmantes de violencia constante. Las restricciones a la circulación afectan las formas de vida de las personas y les impiden llegar a sus escuelas, a sus lugares de trabajo, a sus familias y a los centros de salud, incluidas las 73.000 mujeres que actualmente están embarazadas.

Para apoyar a las mujeres y las niñas de Gaza, el UNFPA y sus asociados han proporcionado seis unidades móviles de maternidad equipadas para prestar atención obstétrica de emergencia. Desde que comenzó la guerra se han entregado medicamentos vitales y suministros de higiene esenciales, como jabón y toallas sanitarias, a hospitales, centros de salud y a mujeres y niñas desplazadas. En la Ribera Occidental, el UNFPA presta apoyo a los servicios en seis espacios seguros y despliega clínicas móviles para prestar servicios de salud reproductiva. Sin embargo, las necesidades están aumentando, por lo que deben abrirse nuevas rutas y facilitar un acceso humanitario seguro que permita que la ayuda vital llegue a las mujeres y niñas de toda la Franja de Gaza.

Actualizado el 11 de diciembre de 2024